ACNÉ

 

El acné es un trastorno de la piel, que se caracteriza por la inflamación crónica de las glándulas sebáceas debida a la retención de sus secreciones en el interior del folículo taponado. Se relaciona con un exceso de actividad de dichas glándulas, que puede deberse a factores tanto externos como internos, tales como: higiene, alimentación, stress, cambios hormonales, uso inadecuado de productos cosméticos, genética, etc. 

Para lograr controlar el problema de la piel acnéica, o mejorar su aspecto, es indispensable efectuar una adecuada rutina de limpieza al menos dos veces al día, usando productos especiales para este tipo de piel, que no contengan jabón y que tengan un pH ácido que los haga efectivos, pero no agresivos, es importante usar un limpiador suave y una loción tonificante para cerrar el poro. 

Esto es util para todo tipo de pieles, pero si cabe lo es más en el caso de la piel acneica por dos razones. En primer porque el acné ya de por sí es una condición inflamatoria, por lo que emplear productos irritantes no hace sino ahondar en el problema. Tampoco usaremos limpiadores que nos dejen la piel tirante ni nos limpiaremos la piel constantemente, primero porque el acné no surge por lavar mal o poco la piel, y segundo porque así se favorece el agredirla, aparte de retirarle su manto ácido. 

Los alimentos grasos, como el chocolate, no producen acné, por lo que no hay que suprimir ninguno en concreto, a menos que las personas afectadas noten que empeoran al tomarlos. 

Las mujeres susceptibles de sufrir acné deben evitar el maquillaje y los cosméticos grasos porque taponan los poros. Se pueden utilizar aquellos que en la etiqueta ponga "no comedogénico", "libre de aceites" o "no produce acné".

No se deben intentar reventar los granos ni manipular las lesiones, puesto que al hacerlo se rompen hacia el interior, aumentan de tamaño y provoca una mayor inflamación. 

Es muy importante el uso de un protector solar Oil free y seborregulador adaptado a pieles grasas para evitar que las marcas se oscurezcan.

Los medicamentos para el acné pueden producir irritación, enrojecimiento y ardor. Al principio se pueden usar menores cantidades y en días alternos (siempre que así lo prescriba el médico) y poco a poco aumentarla. Se aconseja aplicarlos después de haberse lavado y secado bien y evitar el contacto con los ojos. 

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Limpieza
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AVENE CLEANANCE GEL LIMPIADOR SIN JABON

 

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BABE LIMPIADOR PURIFICANTE

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Tratamiento seborregulador:
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NORMADERM HIDRATANTE ANTI-IMPERFECCIONES 50 ML

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AVENE CLEANANCE EMULSION REGULADORA MATIFICANTE

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Para el sol:
Recomendamos especialmente para pieles con tendencia acnéica, el solar;
AVENE CLEANANCE SOLAR SPF 30 50 ML

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